Es una veterana vocalista en su plena madurez artística y vital
La pianista Carla Bley, cuya actuación estaba anunciada dentro del 53 Heineken Jazzaldia el 27 de julio a las 12:30 en el Teatro Victoria Eugenia, ha cancelado la parte final de su gira, por lo que no podrá llevar a cabo ese concierto.
Su lugar lo ocupará, en el mismo lugar y hora, la cantante Mary Stallings, una veterana vocalista de San Francisco que se encuentra en su plena madurez artística y vital. Tan es así que The New York Times dijo hace poco que “Stallings es quizá la mejor cantante de jazz viva”.
Las entradas ya adquiridas para Carla Bley son automáticamente válidas para Mary Stallings, sin necesidad de ninguna acción por parte de quien las compró. Si, por el contrario, desea la devolución del dinero, tiene que solicitarlo en la taquilla del Teatro Victoria Eugenia (horario: 11:30-13:30 y 17:00-20:00), en el teléfono 943 48 19 00 o en el correo electrónico infojazz@donostia.eus
Mary Stallings (voz), Hervé Sellin (piano), Joshua Ginsburg (contrabajo), Mario Gonzi (batería)
La veterana cantante Mary Stallings es el ejemplo perfecto de cómo la madurez artística y vital es fundamental para ser una gran vocalista. Teniendo en cuenta su sentido del swing, su fraseo cargado de blues y su don para la interpretación, es fácil entender por qué The New York Times dijo hace poco que “Stallings es quizá la mejor cantante de jazz viva”. Ya a finales de los años 50 estaba actuando en clubs de la zona de San Francisco, su ciudad natal, con bandas de luminarias como Ben Webster, Cal Tjader, Earl Hines o Wes Montgomery. Después formó parte de las orquestas de Count Basie, Billy Eckstine y Dizzy Gillespie. Los discos a su nombre los grabó acompañada por grandes pianistas, como Monty Alexander y Geri Allen. Tras un largo periodo retirada, fue recuperada para el escenario por el prestigioso trompetista Wynton Marsalis. Stallings ha actuado regularmente en los grandes templos del jazz de Estados Unidos, como el Blue Note o el Lincoln Center, y en festivales como el de Monterey o el de San Francisco.
