Vamos todos juntos. Lo dijeron los Beatles y lo proclamó a los cuatro vientos desde el Escenario Verde el extraordinario guitarrista Gary Clark Jr., que ha hecho la versión más potente de aquel temazo. El blues y el rock’n’roll fluían de la guitarra de Clark para deleite de los congregados en la playa a medianoche. Ese mismo Gary Clark al que ya descubrimos aquí en 2012, cuando empezaba su triunfante carrera.
El blues junta a gente de todo el mundo. Mikel Laboa juntó a los vascos en torno a sus canciones. Sus hermosas melodías cantadas de una forma inconfundible despertaban, y despiertan aún hoy, hondos sentimientos en los vascos, y en las gentes de otros lugares que han tenido la suerte de conocer su obra. Hace diez años que se fue y entre los que más le echan de menos está Iñaki Salvador, el músico que mejor conoce su repertorio, porque fue su pianista durante 25 años. Así que juntó a una banda excelente de tres instrumentistas y dos cantantes para un concierto de homenaje que emocionó al público que llenaba el Victoria Eugenia.
Llenazo también en la Trinidad. Todos juntos para ovacionar a Jacob Collier en su estreno mundial con una banda, pues era la primera vez que tocaba con músicos; hasta ahora, ha construido su fama gracias a sus vídeos en los que toca varios instrumentos en solitario. Después iban algunos de los mejores exponentes de la generación intermedia del jazz: juntos, pero no revueltos, porque cada cual sigue conservando su personalidad, portentos como Robert Glasper, Christian Scott y Terrace Martin.
Qué bonito lo de Izaro en el Escenario Verde a la hora del crepúsculo. Público de todas las edades, familias enteras, todos juntos para escuchar a esta chica que algo tiene que encanta con su canto.
Qué bonito también lo de San Telmo. Qué civismo cultural el de ese público que escuchó con atención la interesante conferencia de Patri Gioalde sobre la irremplazable Billie Holiday y luego apreció el concierto de Skytrain.
Qué bonito lo que hizo el pianista Marco Mezquida a medianoche en el Victoria Eugenia, exprimiendo el repertorio de Ravel. Qué bonito el trasiego de gente toda la tarde y noche por las terrazas del Kursaal. Aquí, en el Heineken Jazzaldia, hay de todo para todos. Come together.
